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La transición a la tecnología LED para focos de suelo ofrece diversas ventajas, que contribuyen a la sostenibilidad, eficiencia y facilidad de uso. Los focos de suelo LED son el estándar moderno debido a su rendimiento y larga vida útil.
Los focos de suelo son versátiles y se pueden integrar en una variedad de entornos exteriores. La forma en que se aplican influye en la atmósfera y la funcionalidad de la iluminación.
Dependiendo de la ubicación, hay factores importantes a considerar. Para los focos de suelo que se utilizan intensivamente o están sujetos a cargas mecánicas, como en las entradas de coches, un alto valor IK (resistencia al impacto) es una especificación relevante. Este indica qué tan bien resiste la luminaria a los golpes y la presión.
Para lugares donde los focos de suelo entran en contacto directo con plantas o cubiertas de suelo, es importante un buen sellado y disipación del calor de la luminaria para evitar el sobrecalentamiento. Esto garantiza la vida útil de la lámpara y previene daños a la vegetación circundante.
El grado de protección de entrada (IP) es de crucial importancia al seleccionar la iluminación exterior, y en particular para los focos de suelo. Esta clasificación indica en qué medida una luminaria es resistente a la entrada de polvo y agua. Para los focos de suelo, que están en contacto directo con la humedad y la tierra, un alto grado de IP es indispensable.
Grado IP | Significado (protección contra polvo) | Significado (protección contra agua) | Adecuado para |
---|---|---|---|
IP44 | Protegido contra objetos sólidos de más de 1 mm | Protegido contra salpicaduras de agua desde todas las direcciones | Espacios exteriores protegidos, como debajo de un porche. |
IP54 | Protección limitada contra el polvo (se permite una cantidad limitada de polvo) | Protegido contra salpicaduras de agua desde todas las direcciones | Espacios exteriores moderadamente expuestos. |
IP65 | Estanco al polvo | Protegido contra chorros de agua desde todas las direcciones | Exposición directa a la lluvia, como en fachadas y caminos. |
IP67 | Estanco al polvo | Protegido contra inmersión temporal (hasta 1 metro, 30 min) | Focos de suelo, bordes de estanques, lugares con riesgo de charcos. |
IP68 | Estanco al polvo | Protegido contra inmersión continua (profundidad específica) | Iluminación subacuática, estanques, fuentes. |
Para los focos de suelo, generalmente se recomienda un grado de protección IP mínimo de IP67 para garantizar un rendimiento y seguridad a largo plazo, dada su posición en el suelo donde el agua puede acumularse.
La instalación de focos de suelo requiere precisión y atención al detalle, especialmente en lo que respecta al drenaje del agua y las conexiones eléctricas. Esta guía paso a paso le ayudará a realizar una instalación correcta.
Determinar y preparar la ubicación: Antes de comenzar, determine la posición exacta de cada foco de suelo. Es útil hacerlo al atardecer o en la oscuridad con una lámpara conectada temporalmente para visualizar el efecto de luz. Elija un lugar que no sea el punto más bajo del jardín para minimizar la acumulación de agua.
Excave un agujero que sea aproximadamente 20-30 centímetros más profundo y ancho que las dimensiones del foco de suelo. Este volumen adicional es necesario para un buen drenaje.
Asegure un buen drenaje de agua: Una de las causas más comunes de daños por agua en los focos de suelo es un drenaje insuficiente. Vierta una capa de 20-30 centímetros de grava gruesa o conchas en el fondo del agujero excavado. Esto asegura que el exceso de agua se drene rápidamente, evitando que la lámpara permanezca en agua estancada durante mucho tiempo. Deje que el cable de tierra sobresalga lo suficiente.
Conexión del cableado: La mayoría de los focos de suelo funcionan a 12V (baja tensión) o 230V (tensión de red). Compruebe qué sistema requiere su foco de suelo.
Haga las conexiones entre el cable de tierra y la lámpara impermeables con conectores de cable estancos o una caja de empalme con resina. Una caja de empalme con resina se llena con una resina especial que sella completamente la conexión contra la humedad. Pruebe siempre la conexión antes de verter la resina, ya que una vez endurecida, la conexión es permanente.
[Video: instrucción para hacer una conexión de cable impermeable]
Colocar y probar el foco de suelo: Coloque el foco de suelo firmemente en el agujero preparado, sobre la capa de grava. Asegúrese de que la parte superior del foco esté al ras del suelo, o de la parte superior de la baldosa o tarima, para un acabado sin fisuras.
Conecte la corriente y pruebe si el foco de suelo funciona correctamente. Compruebe si hay parpadeo o irregularidades en la luz. Si es necesario, ajuste las conexiones. Cuando todo funcione, puede proceder con el acabado.
Acabado del agujero: Rellene el agujero alrededor del foco de suelo con la capa de grava restante y luego cúbralo con tierra, baldosas o el material de superficie elegido. Asegúrese de que el foco esté firmemente sujeto y no pueda hundirse.
El daño por agua es un problema común con los focos de suelo. Puede ocurrir por un prensaestopas mal apretado en la parte inferior del foco, una junta de goma con fugas entre el anillo y el cristal, o una caja de derivación o manguito de cable insuficientemente sellado. Revise estos puntos cuidadosamente durante la instalación y regularmente después.
Para situaciones donde el cableado es difícil o no deseado, los focos de suelo solares ofrecen una solución flexible y respetuosa con el medio ambiente. Estas lámparas se cargan durante el día con energía solar a través de un panel solar integrado y se encienden automáticamente al anochecer.
Los focos de suelo solares son ideales para la iluminación de acento, crear ambiente en jardines o marcar caminos temporales donde no se necesita una iluminación intensa.
El número de focos de suelo necesarios por metro cuadrado depende en gran medida del efecto de iluminación deseado y de la función. Para la iluminación ambiental, es suficiente una mayor distancia entre los focos, por ejemplo, cada 1,5 a 2 metros. Si desea resaltar un objeto específico, como un árbol, a menudo es suficiente un foco potente y bien colocado. Para la iluminación de orientación a lo largo de un camino, puede colocar los focos más juntos, como cada metro, para proporcionar una guía clara.
Sí, los focos de suelo con el grado de protección IP adecuado (mínimo IP67 para focos instalados en el suelo) están diseñados para permanecer en el exterior durante todo el año. Son resistentes a la lluvia, las heladas y el polvo. Una buena instalación con un drenaje adecuado es una condición para garantizar la vida útil de la lámpara y prevenir daños por agua, incluso durante lluvias intensas.
Elija focos de suelo hechos de materiales duraderos y resistentes a la intemperie como acero inoxidable (inox), aluminio anodizado o policarbonato de alta calidad. Estos materiales son resistentes a la corrosión, la radiación UV y los cambios de temperatura. El acero inoxidable es robusto y ofrece una apariencia elegante, mientras que el policarbonato es resistente a los impactos y se decolora menos rápidamente. Asegúrese también de que la conexión del cable en la luminaria sea impermeable y esté firmemente asegurada.
Elegir los focos de suelo correctos es una inversión en la apariencia y funcionalidad de su espacio exterior. Al comprar, preste atención al grado de protección IP, el voltaje (12V o 230V), la salida de luz (lúmenes), el color de la luz (Kelvin) y la elección del material. Al considerar cuidadosamente estos aspectos, elegirá un producto que se adapte a sus deseos y a las condiciones de su jardín.
El mantenimiento regular contribuye a la vida útil de sus focos de suelo. Limpie periódicamente la cubierta de vidrio para eliminar suciedad, hojas y depósitos de cal. Esto asegura una salida de luz sin obstrucciones. Además, revise anualmente las conexiones eléctricas y las juntas en busca de desgaste o daños, especialmente después de períodos de clima extremo. Esto ayuda a detectar y prevenir problemas a tiempo.