
Los materiales de conexión constituyen la base invisible pero crucial de toda instalación eléctrica. Ya sea para conectar cables en una caja de empalmes, instalar una lámpara o montar una clavija en un aparato, la calidad de los materiales de conexión utilizados determina la seguridad, la fiabilidad y la vida útil de todo el sistema. Por eso, elegir los componentes adecuados y las prácticas de instalación correctas es de gran importancia tanto para los profesionales como para los aficionados al bricolaje.
]El mercado ofrece una amplia variedad de materiales de conexión, cada uno con propiedades y áreas de aplicación específicas. Comprender estas diferencias es esencial para tomar decisiones bien fundamentadas.
Los conectores de cables, a menudo llamados conectores de inserción o conectores rápidos, son una solución moderna y muy utilizada para conectar cables eléctricos de forma rápida y segura. Han sustituido en gran medida a las tradicionales clemas de torsión y regletas de conexión en muchas aplicaciones, principalmente por su facilidad de uso y la calidad constante de la conexión. Existen varios tipos de conectores disponibles, incluidas variantes adecuadas tanto para conductores rígidos como flexibles.
La carcasa transparente de muchos conectores facilita la inspección visual de la conexión, permitiendo comprobar si el cable está insertado correctamente y si el cobre hace suficiente contacto.
Las regletas de conexión son el método de conexión tradicional y consisten en una carcasa de plástico o cerámica con bornes metálicos que sujetan los cables mediante tornillos. Aunque son muy conocidas, hoy en día son menos recomendables para instalaciones permanentes, especialmente con cable de núcleo rígido (VD). Sin embargo, siguen siendo adecuadas para cables flexibles, como al conectar una lámpara, siempre que se utilice una puntera para evitar que los hilos se separen. Conectar varios cables bajo un mismo tornillo no es seguro y debe evitarse.
Las clavijas de enchufe forman la parte visible de la conexión entre un aparato eléctrico y la toma de corriente. Existen en numerosas variantes según la intensidad de la corriente, el voltaje y la presencia de toma de tierra.
Como se mencionó anteriormente, las punteras son cruciales cuando se utilizan cables eléctricos flexibles en conexiones de tornillo, como en regletas de conexión o algunos tipos de tiras de terminales. Consisten en un tubo metálico fino, a menudo con un collar de plástico de un color que indica la sección del cable, que se coloca sobre el extremo pelado de un cable flexible y luego se crimpa con una herramienta de crimpado especial. Este proceso, conocido como "crimpar", agrupa firmemente los hilos de cobre en un conjunto compacto.
Además del tipo de conector, las propiedades de los materiales tanto de los conductores como del material de conexión son cruciales. La norma NEN 1010, el estándar de referencia para instalaciones de baja tensión en los Países Bajos, impone requisitos estrictos al respecto. Una instalación correcta comienza con la comprensión de los colores de los cables y su función, y su compatibilidad con el material de conexión.
Para una instalación eléctrica segura, la estandarización de los colores de los cables es esencial. Esto garantiza que cualquiera que trabaje en la instalación pueda reconocer inmediatamente la función de cada cable. Cualquier desviación puede llevar a situaciones peligrosas.
Color del Cable | Función |
---|---|
Marrón | Cable de fase (transporta la corriente) |
Azul | Cable neutro (retorna la corriente) |
Amarillo/Verde | Cable de tierra (toma de tierra de seguridad) |
Negro | Cable de interruptor (para alimentación conmutada, p. ej. a una lámpara) |
Asegúrese siempre de que los cables con la misma función estén conectados entre sí. Conecte un cable marrón con uno marrón, uno azul con uno azul, y así sucesivamente. Esto evita cortocircuitos y situaciones peligrosas.
El diámetro de los cables eléctricos, expresado en milímetros cuadrados (mm²), determina la corriente máxima que pueden transportar de forma segura. Un cable de sección insuficiente para una carga de corriente alta puede provocar sobrecalentamiento e incendios.
Al seleccionar los materiales de conexión, es importante que sean adecuados para la sección del cable correspondiente. Muchos conectores y clavijas indican las secciones de cable permitidas en su embalaje o en el propio producto.
En la mayoría de los casos, opte por un conector de cables, especialmente para cables rígidos y en situaciones donde la fiabilidad y la rapidez son cruciales. Los conectores de cables ofrecen una conexión constante y segura que depende menos de la habilidad manual.
Las regletas de conexión siguen siendo adecuadas para cables flexibles, especialmente al conectar lámparas, pero en ese caso utilice siempre punteras. Evite las regletas para conectar varios cables rígidos bajo un mismo tornillo o en escenarios donde puedan producirse vibraciones o tensiones, ya que esto podría debilitar la conexión.
Los conectores de cables reutilizables (con palanca, como los WAGO 221) están diseñados para ser reutilizados varias veces, siempre que no estén dañados. Los conectores de inserción estándar sin palanca suelen ser de un solo uso. Consulte siempre las instrucciones del fabricante.
La longitud del cobre pelado es crucial para una buena conexión. Demasiado cobre expuesto puede crear riesgo de cortocircuito, mientras que muy poco puede resultar en un mal contacto. Los conectores de cables a menudo tienen un indicador de longitud de pelado en el lateral. Para las regletas de conexión, unos 8-10 mm de cobre son suficientes, asegurándose de que no quede cable desnudo visible fuera de la regleta una vez conectado.
Seleccionar los materiales de conexión adecuados y aplicar las técnicas de instalación correctas son fundamentales para la seguridad y fiabilidad de cualquier instalación eléctrica. Invierta en componentes de alta calidad y siga siempre las normas aplicables y las recomendaciones de los expertos. Una conexión eléctrica segura comienza con la base correcta.